Un año más y cada vez con más motivo, tienen lugar los campamentos internacionales de jóvenes revolucionari@s, un marco de formación y debate organizado por los jóvenes de la IV internacional de todo el mundo. Cada edición es diferente, pero su espíritu es similar: ofrecer un espacio de encuentro y convivencia para todos aquellos y aquellas que quieran construir un mundo libre de opresiones.
Un espacio de debate, comisiones, formaciones y fiestas donde intercambiar experiencias con los diferentes países presentes. Este año se celebra en Igoumenitsa (Grecia). Cada edición de los campamentos se hace en un país diferente de forma rotatoria. Las últimas ediciones se han celebrado en Italia (2010), Francia (2011) y Estado español (2012).
Objetivo: cambiar el mundo
Los planes del capital para hacer pagar la crisis al 99%, a los y las trabajadoras, no se dan de forma aislada sino que tanto los problemas sociales como políticos nos afectan a nivel global. Si el capitalismo se organiza a nivel internacional, nosotr@s también.
Nos sentimos parte de la misma lucha que los y las trabajadoras griegas, que los y las estudiantes que se resisten a la subida de tasas en Italia, Francia, Chile, Reino Unido o Alemania, que las mujeres que reivindican su derecho a no ser consideradas inferiores en todo el mundo y, especialmente, luchamos junto a aquellas que exigen su papel en las revueltas árabes, a los y las activistas que defienden el patrimonio natural de todo el mundo, a con quien disfruta de su sexualidad libremente enfrentándose a los convencionalismos sociales y al peso de la Iglesia. Compartimos la lucha con quien no se resigna, con quien no tiene miedo.
El Campamento es un espacio combativo, donde reflexionar sobre las estrategias para construir resistencias, donde llenarse de ilusión para seguir luchando y fortalecer entre todos y todas estas rebeldías subterráneas, que con esfuerzo y paciencia, harán tambalear al sistema. Hay que prepararse para estas irrupciones, como las revueltas que en el último año hemos visto extenderse por todo el mundo, y que demuestran que la historia y la lucha de clases está viva.