Solamente de éxito total y rotundo pueden calificarse las actividades realizadas con ocasión del homenaje a Yolanda González, militante revolucionaria asesinada por un comando fascista en 1980.
En primer lugar se realizó una concentración con cerca de 200 personas en la que brilló con luz propia el recuerdo de Yolanda. Poco después las y los asistentes pasamos al Salón Rojo del Teatro Principal en el que comenzó el acto propiamente dicho.
Con una sala abarrotada y decenas de personas en pie, Luis Castro, conocido historiador, contextualizó el asesinato en un espacio y un tiempo en el que existían multitud de partidos políticos, donde se demostraba la riqueza intelectual y de debate político del momento, donde ciertos valores como la solidaridad, lo colectivo y el “jugarse el tipo” eran prendas habituales para las mujeres y hombres que se organizaban para cambiar la sociedad. Luis Castro retrató la militancia de la época, el miedo, la represión, las detenciones, la vida y lucha clandestinas y remarcó que no haya habido ninguna rendición de cuentas ni depuraciones del aparato franquista, que en muchos casos se limitó a cambiar el retrato que colgaba de las paredes, sin realizar cambios políticos.
Mar, compañera del Partido Socialista del Trabajo (PST) y de piso de Yolanda durante los hechos explicó cómo se está desarrollando la movilización popular alrededor del caso, denunció el falso proceso de la Transición, la traición de quienes negociaron lo innegociable, desvelo las conexiones de los grupos fascistas con el aparato del estado y explico como se desarrolló en juicio.
Habló de que la tremenda respuesta y el apoyo a la campaña se debe al contexto político actual con la descomposición de esta “democracia con pies de barro”.
Por último hizo una semblanza de Yolanda como persona, como mujer y como militante, donde representaba el “hacer política de otra manera”, la pureza y el compromiso contra la injusticia social.
En tercer y último lugar, Asier, hermano de Yolanda remarcó el perfil humano de ésta, y una sinopsis de la vida y obra de Emilio Hellin, su asesino, condenado a 43 años de prisión y huido sin cumplir condena. También explicó las diferentes iniciativas que se están llevando a cabo en todo el Estado Español, que incluyen desde recogidas de firmas, multitud de actos y movilizaciones, iniciativas parlamentarias tanto a nivel estatal como en Euskadi y Catalunya…
Durante el acto fueron varias las intervenciones que recalcaron que la potencia de la movilización en torno a Yolanda y a la exigencia de justicia solo a sido posible gracias a una perfecta unidad de acción entre la familia, la izquierda y los y las compañeras de la época de Yolanda.
Fue un acto muy emotivo, que por un lado deja un dulce recuerdo y que por otro nos empuja a continuar la lucha no solo contra los restos del franquismo, sino por continuar la lucha en la que estaba embarcada Yolanda; la ruptura con un sistema que beneficia a un@s poc@s a costa del sufrimiento de la mayoría.
En su memoria nosotras no olvidamos.
Como compañero y amigo de Yolanda y como compañero vuestro de Antikapitalistak mi mas grata felicitación por el magnifico acto por el habéis trabajado. Desde Euskal herria, eskerrik asko, muchas gracias. Y seguiremos unidos con la lucha contra la impunidad de los criminales fascistas!
ResponderEliminarMuchas gracias; fuimos mucha gente la que trabajamos`para ese acto. La verdad es que fue precioso, pero está claro que la pelea tanto contra la impunidad del franquismo como por mantener la Memoria requiere de toda nuestra perseverancia. ¡La lucha continúa!
EliminarOscar